Tal vez sea su magnífica torre de 96 metros de altura o esa fachada repleta de estatuas y adornos lo que hace que el edificio del Ayuntamiento sea la joya arquitectónica más importante del conjunto de edificios que rodean la Grand Place. Construido en 1459, tiene, además de la torre que he mencionado, varios detalles que lo hacen único, como el techo, perforado con cientos de lucernas o la estatua de San Miguel Arcángel que corona la torre y que puede verse desde cualquier rincón del centro.
Se puede recorrer parcialmente, sobre todo las entradas y los pórticos, donde hay pequeños y hermosos jardines, también se pueden realizar visitas guiadas, pero solo dos días a la semana y durante un par de horas, de modo que la impresionante visión se conforma con su belleza exterior. Sólo los afortunados que lleguen a la plaza en las horas establecidas, podrán entrar a verlo.
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