Casi al frente de la Iglesia de Sablon, se encuentra una bonita plaza en la que hay una famosa fuente: La de los Condes de Egmont y Hornes. Un grupo escultórico que data de 1864; realizada por el escultor Carlos Auguste Fraikin, es una fuente de piedra con doble escalinata que termina en las esculturas de ambos condes y se adorna en la base con 4 esculturas de bronce y una inscripción que recuerda el asesinato de los Condes; decapitados en 1568 por orden del Duque de Alba, quien los acusó de ser los instigadores del movimiento neerlandés en contra del Rey Felipe II.
Siguiendo hacia el lado opuesto, está el Palacio, una mansión de estilo gótico flamenco y renacentista, que paso a manos privadas en el siglo XVIII, y se mantuvo en la propiedad de la familia alemana Arenberg hasta el final de la I Guerra Mundial; en 1964 pasó finalmente a manos del estado Belga, que lo dedica a la celebración de los grandes eventos protocolares del Ministerio de Relaciones Exteriores.
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