El Metro

No pretendo dictar cátedra. Todo el mundo, en algún momento, llega a Paris y se las arregla para moverse por la ciudad sin mayores inconvenientes. Pero, no sería yo, si no dedico algo de esta bitácora al famoso Metro de Paris; junto al de New York, Londres y Moscú, uno de los más nombrados del mundo. Empecemos, pues, por el principio. Si usted conoce el metro de Caracas (y odia en lo que se ha convertido) permítame que le diga que esa es la maqueta del metro de Paris, básicamente porque la construcción de nuestro metro se la debemos a ellos,
El Metro de Paris, sin embargo, es una red muy vasta que cubre toda la ciudad y se interconecta con pueblos cercanos gracias a sistemas de trenes interurbanos (lo que los españoles llaman cercanías y que nosotros si lo tuviéramos llamaríamos Sistema Bolivariano de Transporte Ferroviario Inter-urbano Che Guevara). Entonces, no hay ninguna razón para andar en taxis – que son carísimos – y muy pocas para montarse en autobuses y exponerse al tráfico infernal de la ciudad.
Todos los lugares a los que uno quiere ir tienen una estación de metro cerca y todas las estaciones de metro, en un punto u otro, se cruzan o permiten trasbordo sin salir del sistema; de modo que se puede ir de un extremo a otro sin tener que salir del subterráneo hasta alcanzar el destino. Es un metro feo, relativamente limpio y viejo. Las estaciones, aunque alguna tiene su encanto, no son como para sentarse a comer con los amigos y los trenes vienen en todas las variedades. En general, se trata de pasillos anchos y fríos. Es el metro.
De modo que para sacarle provecho a su estadía, consígase un buen plano del metro (el que me sirvió más, fue uno que me dieron en el aeropuerto llamado Roissy Bus) y tenga una cosa en mente: Lo que tiene que saber es, cuál es la dirección final de la línea en que está la estación que usted necesita, y circule sin problemas.
Esto conviene saberlo:
- Se puede comprar una tarjeta (Navigo Pass) que le brinda la posibilidad de ir recargando dinero para el metro a medida que lo vaya usando
- Se puede comprar un paquete de 10 tickets de una vez, eso le permite un buen ahorro
- Se puede comprar un boleto de uso permanente con duración de 3 a 5 días, que cubre zonas limitadas de movilización (también puede adquirirse el que no tiene restricciones) y representa un ahorro estupendo.
Por último: nunca, nunca, por ningún motivo deseche el boleto del metro antes de salir de la estación de destino. En algún momento, a la salida, encontrará policías pidiendo una prueba de que usted pagó por usar el metro. Si no tiene el ticket, la multa (que tendrá que pagar de inmediato) puede andar por los 60 euros.